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10. Semanas de 40 Horas (40 Hour Week)

Esta práctica propone que los desarrolladores dediquen 40 horas de trabajo por semana, de tal forma se evita que los programadores se fatiguen y hace que las horas de trabajo sean altamente productivas. Igualmente asegura la calidad del equipo, considerando que éste, no debe asumir responsabilidades que le demanden mayor esfuerzo del que humanamente se puede disponer.

No hace falta dedicar largas jornadas de duro trabajo, pues esto no es garantía de acabar antes. Un equipo “descansado”, sin esfuerzos desmedidos, logra un mejor resultado. Es importante que los desarrolladores de software siempre tengan la mente fresca para construir el software. Posiblemente largas jornadas de trabajo provocaran errores debidos a la concentración y a la motivación del equipo. Es difícil mantenerse en plenitud de facultades durante toda la jornada de trabajo si esta es larga.

Esto marca una diferencia radical con otras metodologías, sobre todo, con aquellas que siguen una línea tradicional donde las estimaciones “de tiempo” deficientes obligan al Equipo de Desarrollo, a sobre-esfuerzos significativos. Los proyectos de desarrollo tradicionales suelen necesitar horas extras y esfuerzos heroicos para entregar el software en la fecha prometida. El resultado suele ser un equipo agotado y menos productivo, lo cual genera una fuerte baja en la calidad del software producido, ya sea en el corto, mediano o largo plazo. Horas extras y esfuerzos heroicos son señales de problemas mayores, como por ejemplo compromisos por encima de las posibilidades, estimaciones pobres, falta de recursos, etc.

Sin embargo, varias organizaciones aceptan convivir con este problema continuamente. Seguramente habrán excepciones donde, según el modelo del negocio que lo necesite, se tendrán que alargar eventualmente las jornadas. En tal caso y de todas maneras, 40 horas de trabajo a la semana pueden distribuirse de muchas formas.